“Es necesario un pluralismo sano. No queramos cortarlos a todos con la misma medida. No es uniformidad, que es distinto de unidad. Unidad quiere decir pluralidad, pero respeto de todos al pensamiento de los otros, y entre todos crear una unidad que es mucho más rica que mi sólo pensamiento” (Homilía 29 de mayo de 1977, I-II p. 75).
¿A qué es necesario aplicar la propuesta del pluralismo en nuestra sociedad?
¿Quiénes nos imponen una unidad que exluye y margina otros pensamientos?